¿Cuáles son las enfermedades de transmisión sexual?

Entre todos los temas de la sexualidad uno de los que más mitos y estigmas tiene es el tema de las enfermedades de transmisión sexual o ETS. Hoy vamos a hablar de cuáles son las enfermedades de transmisión sexual y cómo podemos cuidarnos para prevenirlas.

Primero, ¿enfermedades o infecciones?

Quizá has escuchado las dos versiones: infecciones de transmisión sexual y enfermedades de transmisión sexual, ¿crees que son lo mismo?

Pues la verdad es que no, y justamente, la diferencia está en una sola palabra: infección y enfermedad, mira:

  • ITS (Infección de Transmisión Sexual): una ITS sucede cuando un virus o bacteria ya está en tu cuerpo, pero no ha evolucionado y puede que no haya síntomas todavía.
  • ETS (Enfermedad de Transmisión Sexual): cuando una infección no es detectada y tratada a tiempo puede desarrollarse y evolucionar a una enfermedad de transmisión sexual en donde ya pueden presentarse síntomas mayores y en casos más avanzados, algunas complicaciones.

Para que quede un poquito más claro te damos un ejemplo: puedes tener VPH (Virus del Papiloma Humano) y no presentar síntomas o incluso tenerlo y nunca darte cuenta; pero si es de un tipo más agresivo de VPH, este no se detecta a tiempo, ni se trata, puede evolucionar a lesiones precancerosas o incluso cáncer cervicouterino, es en este punto donde la infección de VPH se convierte en una enfermedad.

– Si quieres entender un poco más a fondo del VPH puedes leer este blog sobre el VPH en la mujer.

En el caso del VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana), sucede lo mismo. Puedes contraer el virus y no presentar síntomas. Si se detecta a tiempo y se trata difícilmente evolucionará; pero si no se detecta podrá seguir desarrollándose hasta convertirse en el Síndrome de Inmunodeficiencia Humana (SIDA), y aquí se vuelve una ETS con mayor posibilidad de complicaciones.

Por eso es clave hablar de detección temprana, porque una ITS diagnosticada a tiempo se trata, se controla y se evita que evolucione a enfermedad.

¿Cuáles son las ITS más comunes?

Ahora que ya entendimos la diferencia vamos a hablar de cuáles son algunas de las infecciones  de transmisión sexual más frecuentes:

  • Virus del Papiloma Humano (VPH)
  • Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH)
  • Clamidia
  • Sífilis
  • Hepatitis C
  • Gonorrea
  • Herpes genital
  • Tricomoniasis

Todas ellas pueden estar presentes sin dar señales al inicio, recuérdalo nuevamente: la prevención es la clave. 

¿Cómo puedo prevenir las enfermedades de transmisión sexual?

Aquí viene lo más importante: la prevención. Cuidarte, informarte y tomar decisiones conscientes puede ayudarte a prevenir las infecciones de transmisión sexual y en dado caso, su evolución a enfermedades. Acá te dejamos algunos tips para prevenirlas:

  1. Tu mejor amigo: el látex
    Las sábanas de látex (u otros materiales) y los condones son los únicos métodos que pueden reducir el riesgo de contagio en cada relación sexual a través de contacto oral, vaginal o anal.
  2. Tus aliadas de la salud: pruebas de detección
    • Las pruebas de detección de ITS serán tus aliadas para mantenerte al tanto de tu salud. Te recomendamos realizarlas como rutina cada 6 meses; si tuviste una relación de riesgo (sin protección), la recomendación es realizarlas 3 meses después.  
    • En el caso de las personas con vulva, es recomendable realizar colposcopia y papanicolaou anualmente para detectar lesiones o alteraciones por VPH.
  3. Comunicación abierta con tu(s) pareja(s)
    Hablar de pruebas, protección y salud sexual no tiene que ser incómodo: es cuidarse mutuamente y es un acto de responsabilidad con tu cuerpo y bienestar.
  4. Vacunas
    Existen vacunas para prevenir algunas ITS como el VPH y la hepatitis.

¿Qué pasa si ya tengo una ITS?

Lo primero es entender que le puede pasar a cualquiera que tenga vida sexual activa y que incluso son más comunes de lo que pensamos. Lo segundo: no te preocupes, ocúpate y trátala a tiempo.

  • ITS como la sífilis, la gonorrea o la clamidia son tratables y curables.
  • Otras, como el VIH, no se eliminan del cuerpo, pero con tratamiento médico pueden mantenerse bajo control y permitirte una vida plena y saludable.

El objetivo es detectar a tiempo para tratar, evitar que se desarrollen o se compliquen y también cortar la cadena de transmisión.

Tu salud sexual también es autocuidado

Cuidar de tu salud sexual no tiene que ser un tema tabú, muy por el contrario, debe ser un hábito y parte de tu rutina de autocuidado, como cuidar tu carita o ir al dentista. Hacerse pruebas, usar condón, vacunarse y hablar sin pena con las parejas sexuales son actos de cuidado y amor propio.

Recuerda: una ITS nunca define quién eres. Lo que sí marca la diferencia es cómo eliges cuidarte y atenderte a tiempo.

Así que ya lo sabes… las ITS y las ETS no son lo mismo. Una infección puede no dar síntomas, pero con prevención, pruebas regulares, detección,  y tratamiento oportuno no se desarrollará como enfermedad con más síntomas y posibles complicaciones.

Así que ya lo sabes… hazte tus pruebas de detección de ITS regularmente (incluyendo colpo y papanicolaou anual) y, sobre todo, recuerda que el sexo protegido también puede ser libre, divertido y saludable. Puedes agendar tus pruebas de detección de infecciones de transmisión sexual en Fundación MSI, llámanos al 55 5543 0000 o toca aquí para agendar tu cita directamente en nuestra página web.